Elongar es la mejor manera de respetar la fisionomia natural. Cuando la fuerza y la elongación trabajan equilibradamente, el músculo puede mover la articulación y al mismo tiempo darle libertad y soltura al movimiento (flexibilidad). En general a la elongación no se le suele dar la misma atención y se prioriza la fuerza, en los gimnasios se le dedica primero una hora a los ejercicios de fuerza y apenas unos minutos a los de elongación. Los ejercicios de fuerza comprimen los músculos y así generando demasiada tensión sobre los ligamentos, fatigando al músculo y la sensación posterior a la practica no es placentera.
De esa manera se hace trabajar el corazón en exceso, con el peligro de agrandarlo y a veces trayendo problemas de salud de difícil resolución, con trastornos cardíacos vinculados al sobre-esfuerzo. Un cuerpo joven no es aquel que luce escultural, sino el que es flexible e integrado a la parte física y mental. Entonces la clave es el estiramiento. El estiramiento favorece el paso de la vida sedentaria a la vida activa porque mantiene los músculos ágiles y flexibles. Dan sensación de bienestar, nos conecta con nuestro cuerpo y así aprendemos a conocerlo y diferenciar lo que nos hace bien y lo que nos hace mal. Todo ser humano tiene fuerza, resistencia, flexibilidad, y temperamento diferente, si cada uno de nosotros aprendemos a conocer nuestro cuerpo y sus necesidades, podemos desarrollar un potencial personal y gradual, construir un fundamento duradero para nuestro bienestar físico que permanecerá para toda la vida.
La flexibilidad reduce la tensión muscular y por ende ayuda a adquirir una mayor facilidad de movimiento, relaja el cuerpo ayuda a mejorar la coordinación facilitando los movimientos y así prevenir lesiones.
De esa manera se hace trabajar el corazón en exceso, con el peligro de agrandarlo y a veces trayendo problemas de salud de difícil resolución, con trastornos cardíacos vinculados al sobre-esfuerzo. Un cuerpo joven no es aquel que luce escultural, sino el que es flexible e integrado a la parte física y mental. Entonces la clave es el estiramiento. El estiramiento favorece el paso de la vida sedentaria a la vida activa porque mantiene los músculos ágiles y flexibles. Dan sensación de bienestar, nos conecta con nuestro cuerpo y así aprendemos a conocerlo y diferenciar lo que nos hace bien y lo que nos hace mal. Todo ser humano tiene fuerza, resistencia, flexibilidad, y temperamento diferente, si cada uno de nosotros aprendemos a conocer nuestro cuerpo y sus necesidades, podemos desarrollar un potencial personal y gradual, construir un fundamento duradero para nuestro bienestar físico que permanecerá para toda la vida.
La flexibilidad reduce la tensión muscular y por ende ayuda a adquirir una mayor facilidad de movimiento, relaja el cuerpo ayuda a mejorar la coordinación facilitando los movimientos y así prevenir lesiones.
En que momento estirar:
En la mañana antes de empezar el día, en el trabajo para relajarse, después de haber estado sentado o de pie durante mucho tiempo, cuando se siente el cuerpo tenso, en cualquier momento del ida, al ver televisión, escuchar música, leer o conversar sentado.
Para mantener el cuerpo sano se requieren tres factores:
1) Dieta rica en cereales integrales y pobre en grasas saturadas.
2) Perseverar en una actitud que promueva la relajación y evite la liberación de radicales libres.
3) Un estado mental que impida contracturar los músculos, bloqueando la circulación de la sangre y la oxigenación de los tejidos.
Las disciplinas como el TAI CHI CHUAN , YOGA y otros colaboran en la reducción del estres, mejoran el sistema circulatorio y respiratorio, faborecen el descanso y la concentración, eliminan los dolores por problemas posturales.
Un equilibrio de cuerpo y mente se obtienen dedicando por lo menos unos 20 ms por día de cualquier actividad corporal que incluya estiramiento.
Consejos:
La mujer que en la etapa perimenopausia (a partir de los 40 años) sufre de la disminución en el valor hormonal, la actividad física le mejora el estado de animo, combate la ansiedad que provoca la perdida hormonal.
El haber tenido una vida sedentaria no significa que no pueda empezar a una edad avanzada, siempre es buen momento para mover el cuerpo.
Se pude optar por hacer caminatas o baile, esos son ideales como punto de partida, ambos son actividades que fortalecen los músculos, evitando que se atrofien.
Los ejercicios, como el yoga, el tai-chi, el baile, la natación, ayudan a estirar. Se recomiendo, al menos, hacer 30 minutos por semana, para que el estiramiento sea efectivo y reunir 3 elementos fundamentales: elongación, flexibilidad y oxigenación.
Elongación
Es estirar los músculos. Cuando se elonga se debe trabajar los órganos sin esforzarlos. Hay que actuar sobre el sistema nervioso central y relajar los nervios, esto favorece la relajación mental. La elongación se realiza estirando el músculo desde la nunca, hasta el tobillo, hacerlo lentamente hasta su mayor posibilidad. Con el tiempo, la elongación produce un estiramiento que se mantiene en la medida que no se abandone esta práctica La elongación actúa primero sobre las articulaciones que es sonde se insertan los músculos que se están estirando. Eso hace que al sangre circule, logrando la oxigenación de sus células.
Flexibilidad:
Es la capacidad de movimiento que tiene una articulación cuando se movilizan los músculos que se insertan en los huesos que ellos unen, el resultado que esta articulación se mantenga joven, flexible y con gran capacidad de movimiento. El peor enemigo es el sedentarismo de las articulaciones, porque las vuelve rígidas y esto hace que se acelere el proceso de envejecimiento de los huesos y de la columna vertebral
Oxigenar
Al cuerpo hay que darle el caudal necesario de aire para que así, las células puedan cumplir sus funciones a través de la respiración El stress hace que sea limitada la capacidad respiratoria y así se utiliza una mínima cantidad de aire, debilitando la capacidad vital de las células. Hay que respirar pausado y a consciencia para contrarrestar este efecto. Además se acelera la eliminación de toxinas y se mantiene un buen estado de los órganos, glándulas y nervios.. Tener cuidado con la cadera. La cadera es la articulación más dañaba (producto de los ejercicios de impacto y de fuerza). La cadera se deteriora con el paso del tiempo porque los huesos pierden la densidad habitual y, en especial, en las mujeres (osteoporosis). Se deberá cuidar, tener una buena ingesta de calcio. La posición erecta del ser humano hace que la cabeza del fémur se desgaste por perder el líquido que mantiene la lubricación. Para evitar este problema, es vital una práctica de actividad que realice el movimiento de la cadera hacia adelante y hacia atrás, como ser yoga o baile
Yoga:
El yoga ayuda a que no se atrofien las articulaciones favoreciendo la conciencia y la armonía del cuerpo. El yoga trabaja con posturas que el elongan los músculos que sostienen la columna vertebral, actúa directamente sobre la médula espinal. Esta conecta el cerebro con el cuerpo y de esta manera, relaja el sistema nervioso. Para comenzar no hace falta un buen estado físico, es ideal para cualquiera y muy especialmente para personas que tienen problemas de postura o circulación sanguínea.
Tai-Chi :
El Tai-Chi es una disciplina oriental que imita los movimientos del agua. Son posturas ondulantes que dejan fluir las articulaciones. Esta disciplina reduce el estres, mejora el sistema circulatorio y respiratorio, ayuda a tener un mejor descanso y elimina los dolores posturales. A las mujeres les estimula la parte hormonal y previene la osteoporosis. Mejora la fuerza, el equilibrio y la resistencia de los ancianos y enfermos cardiacos.
Si lo hace con entusiasmo, descubrirá el encanto.
Ya que lo hace, hagalo con seriedad.
Poco a poco, ira sintiendo el encanto y desarrollara su destreza.
