El ACV es la 3era causa de muerte en el mundo por accidente cerebral y la 1ra en discapacidad en largo plazo. En el mundo se produce un ACV cada 4 minutos, 5,7 millones de personas sufren un ataque cerebral, 4 de cada 5 casos se producen en países donde no se toman medidas de prevención donde una gran mayoría de personas no tienen información para prevenirla.
Esta es una epidemia creciente en América Latina, es una consecuencia por no implementar programas para reducir enfermedades crónicas, como al hipertención, la obesidad y la diabetes.
Si bien es un problema que afecta a ambos sexos, en los últimos años se incrementó la tasa de ataque cerebral en las mujeres. De acuerdo a estudios epidemiológicos, en el sexo femenino, el ACV se presenta en forma más severa. Es importante saber que el ACV se puede prevenir conociendo medidas sanitarias, evitar dietas ricas en grasas y pobres en fibras y antioxidantes. Evitar el tabaquismo, el sedentarismo y el alcohol.
La gente no tiene información sobre nutrición y actividad física, 2 de los factores preponderantes para la prevención de este flagelo. Se come mal y se vive muy sedentariamente. La no información, está relacionada con la sociedad de consumo en connivencia con la industria alimentaria y los laboratorios, en suma, la prevención se logra con una ingesta saludable, actividad física, suplementos dietarios, ya que el alimento que ingerimos están desvalorizados y, por último, actitud positiva en la vida.
